La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) informó que la demanda mundial de pasajeros creció un 3,3 % interanual en marzo, lo que representa una mejora frente al 2,7 % registrado en febrero. A pesar del aumento, la capacidad de las aerolíneas creció un 5,3 %, lo que provocó un leve retroceso en el factor de ocupación, que descendió al 80,7 % tras haber alcanzado niveles récord en meses anteriores.
Willie Walsh, Director General de la IATA, destacó que “aunque se observan señales de enfriamiento en Norteamérica, el crecimiento global del sector continúa”, y subrayó la necesidad urgente de mejorar la infraestructura aeroportuaria y la gestión del tráfico aéreo para acompañar la demanda.
Comportamiento por regio9nes: Asia-Pacífico lidera
En los mercados internacionales, el crecimiento interanual fue del 4,9 %, por debajo del 5,9 % de febrero. Esta moderación se atribuye en gran parte a la normalización de los niveles post-COVID. Entre las regiones, Asia-Pacífico mostró el mejor desempeño, con un repunte del 9,9 % en la demanda y un factor de ocupación del 84,1 %.
Por su parte, Europa creció un 4,9 %, con una ocupación del 78,2 %, mientras que Latinoamérica registró un aumento del 7,7 %, aunque su factor de ocupación cayó a 80,9 %. En contraste, las aerolíneas de Oriente Medio y Norteamérica experimentaron descensos en la demanda del -1,0 % y -0,1 % respectivamente. En el caso de Oriente Medio, la celebración del Ramadán influyó en los patrones de viaje.
Mercados domésticos: desempeño dispar
En cuanto a los mercados nacionales, el crecimiento fue más moderado, con un avance global del 0,9 %. India (11,0 %) y Brasil (8,9 %) lideraron el crecimiento interno, mientras que Estados Unidos (-1,7 %) y Australia (-1,2 %) mostraron retrocesos. El factor de ocupación doméstico también se vio afectado, con una baja de 1,3 puntos porcentuales, pese a que la capacidad aumentó un 2,5 %.
A medida que el sector aéreo sigue su proceso de recuperación, IATA advierte que los retos estructurales como la cadena de suministro y la capacidad de gestión en aeropuertos podrían limitar el potencial de crecimiento si no se abordan con urgencia.

