Por Armando de la Garza
Ciudad Ho Chi Minh, Vietnam. – Vietnam, país de rica geografía y profunda historia, ofrece a sus visitantes experiencias inolvidables a través de sus cauces fluviales. El más visitado de todos, y eje central del turismo en el sur del país, es indudablemente el río Mekong.
El Mekong atrae a la mayor cantidad de turistas gracias a la accesibilidad de su delta, una vasta y fértil región fácilmente conectable con Ciudad Ho Chi Minh. Este delta se ha consolidado como un destino turístico clave, famoso por sus vibrantes mercados flotantes, los cruceros que navegan sus ramificaciones y la posibilidad de experimentar la vida local mediante estancias en casas tradicionales.
La importancia cultural y económica del Mekong lo convierte en una parada esencial para cualquier viajero en Vietnam.
Sin embargo, el atractivo fluvial del país no se limita al sur. Otros ríos ofrecen experiencias igualmente cautivadoras, aunque de distinta índole.

En el centro de Vietnam, en la antigua capital imperial de Hué, el río Perfume se presenta como un oasis de serenidad. Este cauce es ideal para tranquilos paseos en barco, permitiendo a los turistas admirar la histórica ciudad y sus pagodas desde una perspectiva diferente y relajante.
Para los amantes de la emoción y el paisaje agreste, el norte de Vietnam alberga un destino imperdible: el río Nho Que en la provincia de Ha Giang. Este río, enclavado en un impresionante paisaje montañoso, es un imán para los viajeros en busca de aventura y vistas espectaculares. La topografía única de la zona hace del Nho Que un destino popular para el turismo de exploración y senderismo.

Desde los bulliciosos mercados flotantes del delta del Mekong hasta los paisajes escarpados del Nho Que, los ríos de Vietnam no solo configuran la geografía del país, sino que también actúan como arterias vitales para su cultura, historia y, cada vez más, para su floreciente industria turística.